Opinión del Toyota iQ Gama 2009

Hasta la fecha he sido propietario de un Golf Sprinter 1.8 90cv (el de los cuatro faros redondos), un Smart 55cv, un Ibiza 1.4 75 cv (gama 2002) y actualmente un Mazda 2 1.3 86cv. Todos ellos siempre en versión gasolina y 3 puertas (ya sé, ya sé, en el caso del Smart sobra la aclaración ;)) Tras mi experiencia con el Smart, puedo decirle a Ismael que este tipo de coches "de juguete" transmiten más sensación de seguridad cuando te ves en su interior, debido a que las cotas de espacio están magistralmente optimizadas, la suspensión endurecida y la calidad de los materiales (asientos, cinturón de seguridad) suele estar por encima de otros coches algo más grandes. Pero dicho esto, no se puede obviar que las leyes de la física se imponen a la percepción de nuestros sentidos... Con el Smart, en ciudad eres el puto amo, pero en carretera, es mejor que ni el viento ni la lluvia se crucen en tu camino, porque realmente lo pasas mal. Y si encima se combinan lluvia y viento lateral, fácilmente te puedes cambiar de carril sin querer, sin mover siquiera el volante. Yo tenía el renting del Smart a 4 años, pero no aguanté más de 3 por culpa de algunas peripecias de este estilo. Al amigo Mincho me gustaría decirle que me parece muy bien que admire el iQ (a mí tambien me gusta, ojo) pero no por ello deje de ser riguroso. No se puede decir a los demás que un coche de 298 cm es más seguro que un Seat Ibiza que estoy seguro d que no has conducido en tu vida. Precisamente, de todos mis coches, el que me aportó más aplomo y tranquilidad en todo tipo de situaciones (incluso nieve sin cadenas) fue el Ibiza, y por eso me acompañó durante 6 años. Si actualmente tengo un Mazda 2 es únicamente porque la nueva generación del Ibiza ha crecido 15 cm respecto a la del 2002, ahora excede los 4 m y en mi situación particular (el 95% del tiempo 1 sólo ocupante) no es una compra racional. Pero volvería "de cabeza" a un Ibiza de 360 a 380 cm de longitud exterior. Con el Smart lo intenté, lo disfruté y lo pasé muy bien la mayor parte del tiempo, pero tambien me llevé los peores sustos que he conocido al volante. Soy defensor de este tipo de coches por su racionalidad , y si mi economía lo permitiera, no dudaría en adquirir el Toyota iQ COMO SEGUNDO COCHE, para uso urbano y escapadas a un radio máximo de 200 km si el parte meteorológico lo permite. Me parece el coche indicado para personas como Amalia, que poseen otro coche de más empaque para sus desplazamientos largos. Pero como coche único, cualquier microcoche como el Smart ó el iQ son insuficientes y me parece irresponsable realzar su seguridad por encima de la de coches de segmentos superiores. Los crash-test se hacen en condiciones distintas para cada segmento de vehículos. Si tu prefieres chocar frontalmente contra un muro a 80 km/h conduciedo un coche en el que solamente 25 cm separan tus pies de la matrícula (por muy resistente que sea la célula tridion de seguridad) pues yo eligo otro donde hay ante mí 100 cm de espacio deformable y que, además, por su mayor peso, anchura y estabilidad, es mucho más difícil que me salga de mi trazado hasta llegar a topar con el muro.