El Q7 es el primer todo terreno de Audi y se ha lanzado para competir con el cada vez más nutrido segmento de los SUV de lujo y altas prestaciones, entre los que se encuentran el Porsche Cayenne, Volkswagen Touareg, Mercedes-Benz ML o BMW X5. El Q7 está basado sobre el prototipo Pikes Peak quattro presentado en enero de 2003 y traslada la nueva línea de diseño de la marca Audi al segmento de los SUV Premium.
El coeficiente aerodinámico del Audi Q7, en el caso de las versiones con suspensión de muelles de acero, es de Cx 0,37. Si se utiliza la suspensión neumática, debido a la reducción de la altura de la carrocería a altas velocidades, puede llegar a ser incluso de 0,34, como es el caso en el V6 FSI. Los dos tubos del sistema de escape se han colocado de forma simétrica. En las versiones con motor V6, su diámetro mide 80 mm, mientras que en el V8 4.2 FSI es de 100 mm.
Once colores exteriores
Los colores son: Plata mercurio metalizado, Gris cuarzo metalizado, Gris cóndor metalizado, Gris lava efecto perla, Negro intenso, Negro phantom efecto perla, Azul cobalto metalizado, Rojo granate efecto perla y Blanco cala, Beige bahía metalizado y Verde platanero metalizado.
La parte inferior de los parachoques y las molduras protectoras de las puertas, con las que Audi combina estas pinturas de serie, están disponibles en color negro y gris oscuro. Opcionalmente puede optarse por los colores de contraste gris platino mate y plata mercurio mate.
Su longitud es de 5.086 mm, su batalla de 3.002 mm. La anchura de 1.983 mm y la altura de 1.737 mm (con tren de rodaje de acero).Uno de los principales objetivos perseguidos durante el desarrollo del Audi Q7 fue conseguir la máxima rigidez estática y dinámica de la carrocería autoportante. Los ingenieros de Audi alcanzaron este objetivo gracias a la compleja construcción ligera de acero. Un 26% de los componentes se han fabricado en aceros de alta resistencia, e incluso un 32% en tipos de resistencia superior y resistencia máxima.
En algunas zonas, como por ejemplo el revestimiento del suelo, se han usado tailored blanks (chapas a medida), cuyos diferentes grosores se generan en el proceso de laminación. Un 6% de los componentes de la carrocería están compuestos de aluminio; se trata de los guardabarros, el capó del motor y el portón del maletero.
En comparación con los componentes tradicionales fabricados en chapa de acero, el uso de aluminio ha permitido a Audi ahorrar 22 kg de peso. Para poder fabricar el portón del maletero en su característica y fluida forma, ha sido necesario recurrir a los muchos años de experiencia acumulada en el ámbito de la construcción ligera en aluminio. Sólo el portón de aluminio reduce el peso aprox. 7,5 kg, suponiendo además una ventaja adicional para el cliente, ya que requiere un menor esfuerzo para su manejo. El Audi Q7 equipado con el motor de gasolina V8 pesa 2.240 kg.
Técnicas de unión
En el montaje se emplean modernos procesos y métodos de unión, como por ejemplo la soldadura por láser y la soldadura híbrida. Las exigencias de calidad establecidas por Audi se aprecian en la superficie de la carrocería, y más concretamente en sus precisas y finas juntas. En las zonas sometidas a mayor carga, las uniones se han creado con ayuda de casi 80 m de puntos de soldadura, en el marco del techo encontramos 2,2 m de puntos de soldadura láser en cada lado.
Protección ante colisiones
Las zonas con un comportamiento de deformación claramente definido desvían las fuerzas de choque de una forma controlada, de modo que el rígido habitáculo garantiza un espacio máximo de supervivencia.
En caso de producirse una colisión frontal, un sensor de aceleración ubicado cerca de los faros, en colaboración con otros sensores situados en los montantes B y C, registra el choque en cuestión de pocas milésimas de segundo. Unos milisegundos más tarde, la unidad de control activa los pretensores del cinturón, con la finalidad de evitar que los cinturones no se ciñan al cuerpo del ocupante. Si en las antes citadas circunstancias acontece que se supera un cierto nivel de cargas, los limitadores de fuerza del cinturón ceden convenientemente, de manera que el corrimiento del cinturón posibilite que el cuerpo pueda desplazarse hacia delante, donde será acogido por la bolsa de aire desplegada del correspondiente módulo airbag.
Los limitadores de fuerza de los cinturones están también presentes en las plazas exteriores de la segunda fila de asientos. Los airbag frontales se accionan en dos etapas.
Tanto el volante como el airbag del conductor mantienen su posición durante el choque gracias a un dispositivo mecánico de deslizamiento que incluye una función de amortiguación en la zona de unión con la columna de dirección. Un acolchado capaz de absorber las fuerzas del choque ubicado debajo de tablero de instrumentos, en la zona de los pies y en la moqueta protege las piernas y pies del conductor, mientras que un dispositivo en la pedalería suelta los pedales.
En la carrocería, un sistema de soportes en la parte delantera, fabricados parcialmente en acero de alta resistencia, se encarga de recibir el impulso del choque. Ya las traviesas del parachoques distribuyen las fuerzas uniformemente y las dirigen hacia los largueros, cuyo comportamiento ha sido adaptado al cubretablero y al suelo del vehículo. Las taloneras, que incluyen en su interior unos tubos de refuerzo, los montantes de acero de alta resistencia y el perfil del marco del techo, que abarca del montante A al D, distribuyen las fuerzas restantes de un modo que hace posible que las cargas que ha de soportar el habitáculo se mantengan reducidas.
En caso de colisión lateral entran en juego otros elementos de protección ubicados en la carrocería. Las puertas se cubren con los marcos de las paredes laterales, mientras que sus revestimientos son altamente deformables en determinadas zonas. Los marcos de los asientos delanteros mantienen su forma estable gracias a los rígidos refuerzos integrados.
Seguridad en sus tres filas
El habitáculo del Audi Q7 incorpora airbags laterales delanteros de serie, que se encargan de proteger el torso y la pelvis de los pasajeros. También de serie, los airbags laterales se equipan en las plazas laterales de la segunda fila de asientos. El Audi Q7 dispone de serie del sistema de airbags para la cabeza sideguard, que cubre completamente la superficie de las ventanillas laterales hasta la tercera fila de asientos. Las bolsas de aire se inflan mediante un generador de gas híbrido. Una vez activados, no vuelven a vaciarse inmediatamente; permanecen inflados durante un tiempo para ofrecer protección en caso de una posible colisión secundaria.
El nuevo Audi Q7 cumple ya con los requisitos de futuras normativas, es decir, que es capaz de soportar una colisión en la que un 70% de la sección frontal del coche choca con la barrera deformable, a una velocidad de hasta 80 km/h.
El cuadro de mandos se reviste de serie con una capa denominada slush. La imagen del interior se caracteriza por superficies uniformes, tanto en los materiales como en los colores.
En el puesto de conducción, el contraste de color viene dado por el cuadro de mandos; su visera es de color negro o beige, mientras que los reposabrazos de las puertas pueden revestirse en cuero napa fina en combinación con el paquete de diseño de cuero plus. Las inserciones de serie son de madera raíz de nogal naturaleza.
Inserciones en aluminio
La imagen del interior se completa con las inserciones opcionales. Puede optarse por Aluminio Marlin plata o por una de las dos maderas nobles: Madera de fresno olivo y Tamo (una madera oscura procedente de Japón). Las salidas de aire, en diseño de aluminio, las pequeñas inserciones de aluminio en los embellecedores de madera, los discretos aros y resaltes de las superficies y mandos, así como el paquete de iluminación que incluye luces en la zona de los pies en tecnología LED completan el ambiente del interior.
Algunos elementos opcionales que completan el interior son el revestimiento en Alcantara del techo y los montantes y distintos tapizados en piel. Aquí puede elegirse entre el cuero graneado Cricket, la suave calidad del cuero Verano o la tela Cosmos de serie. Los asientos deportivos con regulación eléctrica pueden equiparse con el cuero Verano o con una combinación de cuero y Alcantara.
Junto a la versión de serie que incluye los asientos normales tapizados en tela Cosmos y moqueta y alfombrillas Fresco, los clientes del Audi Q7 pueden optar por uno de los cuatro paquetes de diseño disponibles; con ellos pueden combinarse de forma armónica los asientos, sus tapizados, la moqueta, las alfombrillas, las inserciones y los embellecedores.
En el Audi Q7 4.2 FSI, el paquete de diseño de cuero pertenece al equipamiento de serie. Este paquete incluye la tapicería en de los asientos en cuero Cricket.
Inspirado en el Audi A6
En su diseño, el interior del Audi Q7 está inspirado en el del A6 y A8. Las formas del salpicadero y del puesto de conducción están basadas en el Audi A6: la consola central se ha integrado de forma orgánica en el puesto de conducción, los instrumentos principales (velocímetro y cuentarrevoluciones) han mantenido su diseño en forma de gota de agua.
El ancho y alto túnel central se ha prescindido de la palanca del freno de mano gracias a la implementación del freno de estacionamiento de accionamiento por pedal. El módulo multimedia MMI está ubicado en el túnel.
El Audi Q7 incorpora de serie el MMI en su versión basic plus con pantalla monocroma, incluye un sistema de sonido con once altavoces y una potencia total de 180 vatios . El sistema MMI puede ampliarse con un sintonizador doble y una pantalla en color.
Sistema de sonido Bose con 14 altavoces
Otros componentes son el sistema de sonido Bose Surround con procesador de sonido digital y 14 altavoces, así como un gran subwoofer, un sintonizador de audio digital, un sintonizador de TV analógico/digital y dos sistemas de navegación diferentes con reproductores de CD y DVD. Un teléfono de automóvil, una preinstalación para teléfono móvil con interfaz Bluetooth y sistema de diálogo por voz.
De serie se incluye ya un equipo de radio con once altavoces y un lector de CD integrado en el salpicadero. El equipamiento de serie incorpora también un paquete de sensores con sensor de luz y lluvia, un control automático de las luces de marcha y una función de luces coming home/leaving home, el sistema de información al conductor (FIS) y un volante multifuncional de cuero que permite el equipo de música, el MMI y, opcionalmente, el control por voz y el teléfono.
El Audi Q7 4.2 FSI incluye adicionalmente el control automático de la velocidad
Climatización
Uno de los elementos especiales del climatizador es la rejilla de salida de aire ubicada en el centro del salpicadero, que proporciona una ventilación indirecta. En el lado del conductor y del acompañante, la salida de aire y la temperatura pueden regularse de forma independiente. La regulación automática se realiza dependiendo de la posición del sol, mientras que un sensor de la calidad del aire activa automáticamente, en caso necesario, la función de recirculación del aire. Opcionalmente, Audi incluye en el Audi Q7 un climatizador automático de cuatro zonas, capaz de generar uno valores superiores de frío y calor y de diferenciar aún más las corrientes de aire. El sistema de cuatro zonas incorpora un climatizador propio en la pared lateral izquierda del maletero y un panel de control independiente entre los asientos delanteros al que pueden acceder los pasajeros de las plazas traseras. Diez sensores encargados de registrar la temperatura en el interior del vehículo, salidas de aire adicionales en los montantes C y un total de 19 motores eléctricos forman parte de este climatizador.
Todas las versiones del Audi Q7 incorporan de serie una bomba de agua adicional eléctrica que, con sólo presionar un botón, utiliza el calor residual del agua de refrigeración para climatizar el interior del vehículo. El Audi Q7 3.0 TDI incluye además a bordo una calefacción adicional de 5 kW de potencia. La calefacción estacionaria adicional, que incorpora ventilación estacionaria, puede activarse por radiofrecuencia, a través del MMI o por medio de un temporizador.
Techo panorámico
Un equipamiento opcional es el techo de cristal panorámico denominado open sky system. El “open sky system” tienen una longitud de aprox. 1.700 mm y está compuesto por tres elementos de cristal. El elemento delantero puede desplazarse o abrirse hasta una longitud de 490 milímetros mediante un mando giratorio, mientras que el trasero puede desplazarse. Dos cortinillas ligeramente transparentes (la delantera eléctrica, la trasera manual) evitan el sobrecalentamiento del habitáculo. Una red derivaviento reduce el ruido y las corrientes.
Limpiaparabrisas térmicos
Los motores de los limpiaparabrisas: invierten el sentido de giro de los limpiaparabrisas de forma automática. El brazo derecho ejecuta un movimiento ascendente con el propósito de ofrecer un campo de visibilidad lo más amplio posible. En estado de parada, los dos brazos permanecen fuera de la vista del conductor, en el lado de sotavento del capó del motor para evitar ruidos aerodinámicos. Para prevenir el envejecimiento de las gomas, las escobillas se colocan en la dirección contraria después de cada uso. En caso de temperaturas por debajo de los 4ºC, el motor eleva ligeramente los limpiaparabrisas; de este modo son calentados por las salidas de aire del interior del vehículo y no se congelan quedándose pegadas al parabrisas.
En cuanto a los compartimentos portaobjetos cuenta con cuatro bolsas de las puertas incorporan soportes aptos para botellas de hasta 1,5l de volumen, a lo que hay que añadir seis portavasos. Además, la consola central y el reposabrazos central incluyen también diversos compartimentos portaobjetos. En la zona de los pies del acompañante, en el revestimiento del maletero y en los respaldos de los asientos delanteros se han integrado redes portaobjetos, mientras que en el módulo del techo encontramos un portaobjetos que sirve, por ejemplo, para guardar las gafas. Opcionalmente, los clientes del Audi Q7 pueden solicitar un espacioso reposabrazos central delantero de confort con compartimentos independientes para conductor y acompañante.
Los asientos del Audi Q7 presentan un diseño completamente nuevo. El asiento del conductor puede ajustarse en altura, la columna de dirección en altura y profundidad. Básicamente, se puede elegir entre tres configuraciones de asiento diferentes, ya que el Q7 está disponible en versiones de 5, 7 ó 6 plazas.
El Audi Q7 se comercializa de serie en versión de 5 plazas. En este caso, la banqueta de la segunda fila de asientos está dividida en relación 60:40, y de forma opcional ambos elementos pueden desplazarse longitudinalmente aprox. 100 mm; de este modo, los pasajeros podrán disfrutar del mayor espacio para los pies de su clase. Los respaldos de los asientos están divididos entre sí en una relación 40 : 20 : 40; en el elemento central se ha integrado un reposabrazos con portavasos desplazable. Este elemento puede además abatirse completamente, de modo que se dispone de un espacio de carga de 30 cm.
Si se abaten los tres respaldos, para lo que no es necesario desmontar los apoyacabezas, se obtiene un suelo de carga plano que queda a ras del nivel del maletero. Además, para conseguir mayor confort, los respaldos de la segunda fila pueden inclinarse 10 grados.
En la versión de 7 plazas, la tercera fila de asientos incorpora dos asientos, aptos para personas con una altura de hasta 1,60 metros. En caso necesario, pueden abatirse quedando integrados en el suelo de carga. Para ello se ha optado por un mecanismo que desplaza ligeramente los respaldos, divididos en una relación 50 : 50, y los apoyacabezas se abaten por sí solos. En los revestimientos laterales del maletero encontramos además soportes para bebidas.
Acceso a la tercera fila
En el Audi Q7 de 7 plazas, los asientos de la segunda fila incorporan una función de desplazamiento longitudinal de serie. Para poder acceder a la parte trasera los asientos se han equipado con un mecanismo de desplazamiento: al inclinar el respaldo hacia delante unos 50 grados, todo el asiento se desplaza hacia delante (21 centímetros si el asiento se encuentra en la posición posterior).
En el Audi Q7 de 6 plazas, los asientos individuales desplazables longitudinalmente de la segunda fila adoptan un diseño “deportivo”. El cojín del asiento presenta un acolchado más grueso, es más ancho y largo e incorpora laterales más altos. En la zona de los hombros, los respaldos son más anchos y blandos.
Entre ambos asientos de confort se ha ubicado una consola central independiente con dos portavasos y un gran compartimento portaobjetos, así como un reposabrazos abatible.
La segunda fila de asientos ofrece además opcionalmente mesas plegables en los respaldos de los asientos delanteros, así como cortinillas en las puertas traseras y en el portón del maletero. También incluye cristales oscurecidos, que evitan un sobrecalentamiento del interior, y, opcionalmente, un acristalamiento doble de las lunas que amortigua el ruido exterior. Las fijaciones Isofix para asientos infantiles se incluyen de serie en la segunda y en la tercera fila de asientos opcional. Para el asiento del acompañante puede equiparse como opcional. En este último caso se incluye también la posibilidad de desactivar el airbag del acompañante, y en lugar de sistema mecánico, es un dispositivo eléctrico en encargado de bloquear las puertas traseras para evitar que puedan abrirse por accidente.
Hasta 28 configuraciones
El funcional concepto de asientos del Audi Q7 posibilita hasta 28 configuraciones de carga diferentes. El volumen de carga máximo es de 2.035 litros sin tener que desmontar los asientos. En su versión de 5 plazas, el Audi Q7 dispone de un maletero estándar de 775 litros. Incluso dando uso a las tres filas de asientos, sigue quedando un volumen de maletero de 330 litros. La forma del portón del maletero, cuya manecilla se desbloquea eléctricamente, ofrece un acceso a la zona de carga de 1.221 mm de ancho.
Opcionalmente, el portón del maletero puede equiparse con motores eléctricos que pueden accionarse mediante un interruptor en la puerta del conductor, el control remoto de la llave o un botón en el mismo portón. Dos motores colocados en sentido transversal actúan directamente sobre las bisagras por medio de un estribo. Una función de programación posibilita al conductor determinar la posición final superior del portón según lo desee.
Gracias al equipamiento opcional adaptive air suspension, cargar el maletero resulta aún más fácil; la parte trasera de la carrocería disminuye su altura en 71 mm pulsando una tecla, con lo que el borde de carga queda a 765 mm.
116 cm de ancho de carga
El Audi Q7 incorpora de serie un robusto borde de carga fabricado en acero inoxidable, que se encuentra al mismo nivel del suelo de carga. El ancho de carga es impresionante: 1.159 mm, suficiente para grandes bolsas de golf. El equipamiento de serie incluye también una cubierta para el maletero, que nivela la posición variable de los respaldos en la segunda fila de asientos mediante dos persianas enrollables adicionales. Las argollas de amarre de serie pueden utilizarse para fijar cintas tensoras o cuerdas. El equipamiento de serie abarca además una red separadora y barras longitudinales para el techo.
Audi ofrece de serie una rueda de repuesto de 18 pulgadas de iguales características que el resto de las ruedas. Opcionalmente, el SUV de altas prestaciones puede equiparse con una rueda de repuesto plegable o con un producto estanqueizante para neumáticos. Sobre él, en el suelo de carga doble, queda espacio para una bandeja protectora impermeable extraíble. Esta bandeja es ideal para transportar objetos sucios o mojados, como por ejemplo las botas de esquí, o cualquier tipo de utensilio pequeño. En la versión de 5 plazas, detrás de la segunda fila de asientos encontramos otro gran compartimento portaobjetos.
Caja portaobjetos desplazable
Presenta accesorios como una bolsa extraíble para hasta cuatro pares de esquís o dos snowboards, de una alfombrilla reversible para el maletero, que también protege el borde de carga, de un sistema de rieles con distintas argollas de sujeción, barras telescópicas y cintas de sujeción, similares a las que encontramos en el Audi A6.
Algo más adelante, estos rieles podrán complementarse con una caja portaobjetos que aprovecha todo el ancho del maletero. Esta caja podrá cargarse desde el interior a través del reposabrazos central en posición abatida, y además podrá inclinarse 90 grados, sirviendo así como una práctica caja para colocar la compra.
Otro detalle de confort muy útil es el enganche del remolque del Audi Q7. Opcionalmente puede equiparse con un accionamiento eléctrico que, mediante una tecla en la zona de carga, extrae y abate el enganche. Las versiones 4.2 FSI y 3.0 TDI pueden arrastrar 3,5 toneladas de peso con freno y 705 kg sin freno. Incluso con la elevada carga admisible y la carga sobre techo (140 ó 100 kg) deberían estar preparadas para afrontar cualquier situación.
Para su lanzamiento, el Audi Q7 está disponible con un motor de gasolina y un motor Diesel; un segundo motor de gasolina será lanzado al mercado en el segundo semestre de 2006. Todos incorporan la tecnologías de inyección directa.
La gama mecánica en cuestión esta compuesta por un nuevo V8 con 4,2 litros de cilindrada e inyección directa de gasolina FSI por un lado, y el 3.0 TDI con sistema common rail e inyectores piezoeléctricos en línea. En el segundo semestre de 2006 aparecerá un motor de gasolina V6 de 3,6 litros, también con tecnología FSI.
El V8 con sus 4.163 cc de cilindrada está estrechamente emparentado con el motor que ya montara el Audi RS 4. En el Audi Q7, este propulsor desarrolla 350 CV (257 kW) de potencia, resultante a 6.800 rpm. Por el contrario, su par motor es mucho más potente que en el RS 4: alcanza los 440 Nm. Su mejor valor de elasticidad está disponible a 3.500 rpm, 85% del cual se libera ya a 2.000 rpm.
El nuevo V8 de gasolina pertenece a la familia actual de motores en V de la marca, caracterizada por un ángulo de los cilindros de 90 grados y una distancia entre cilindros de 90 milímetros.
Un accionamiento por cadena en dos fases de fácil mantenimiento, compuesto de tres cadenas de rodillos simplex, es el encargado de accionar los cuatro árboles de levas; para ahorrar espacio se ha montado en la parte trasera del motor. Una cuarta cadena se encarga del accionamiento de los grupos secundarios.
El bloque motor del V8 ha sido fabricado siguiendo el método de fundición a bajas presiones en una aleación de aluminio y silicio, los pistones y los aros se deslizan en las camisas sobre duros cristales de silicio. No es necesario montar camisas independientes, lo que permite obtener un hueco entre los cilindros de sólo 5,5 milímetros de ancho y una consiguiente reducción del peso. Las modificaciones realizadas en el cárter del aceite y en la bomba de agua garantizan también sobre terreno exigente el suministro adecuado de lubricante; del mismo modo han sido también modificados en los otros motores del Audi Q7.
El V8 aspira el combustible mediante un nuevo colector de admisión de dos etapas fabricado en magnesio. Motores eléctricos accionan mediante válvulas el colector y el movimiento de la carga (tumble). Dos bombas de alta presión, accionadas por los árboles de levas de admisión, envían el combustible a dos depósitos de acero inoxidable comunicados entre sí. Una de las unidades de control más modernas existentes en el mercado gestiona todo el proceso: el Motronic MED 9.1.1.
Inyección directa con lambda uno
Al igual que el motor del RS 4, el V8 del Audi Q7 también funciona con inyección directa de gasolina FSI. Aquí, la gasolina no se inyecta en el colector de admisión, sino que se inyecta directamente en la cámara de combustión, con lo que se consigue una homogénea mezcla del combustible y el aire en relación Lambda uno. Gracias al efecto refrigerante del combustible al ser directamente inyectado, los ingenieros de Audi han podido aumentar la compresión básica del motor.
Como resultado se obtiene una combustión muy efectiva y, consecuentemente, un aumento de la potencia, que queda de manifiesto especialmente en la espontánea respuesta del motor. Los motores FSI proporcionan más potencia que los convencionales sistemas con inyección en el colector de admisión, una ventaja que coincide además con un comportamiento de consumo de combustible mucho más contenido. El motor V8 FSI pone de manifiesto su significativa potencia especialmente en el ámbito de carga parcial, que es el más frecuente, siendo el consumo de combustible en comparación con un motor de inyección en el colector de admisión convencional entre un 5 y un 7% menor.
Prestaciones del 4.2 V8
El Q7 equipado con el motor V8 acelera en 7,4 segundos de 0 a 100 km/h. La velocidad punta alcanza los 244 km/h. Las versiones que montan la suspensión neumática alcanzan 4 km/h más gracias a la reducción de la altura de la carrocería y al reducido coeficiente de penetración.
El consumo medio es de 13,6 litros de combustible Super Plus por cada 100 km; con poca reducción del rendimiento, el V8 acepta también combustible Super. Naturalmente, además con la normativa Euro 4. En el sistema de escape se han integrado dos catalizadores anteriores cerca del motor y catalizadores en los bajos del vehículo. Colectores de tubo de chapa aislados por aire se encargan de que la depuración de los gases de escape alcance la temperatura de funcionamiento rápidamente.
El 3.2 V6 de 280 CV
Como segundo motor de gasolina, Audi ofrecerá en el segundo semestre de 2006 un V6 de 3,6 litros de cilindrada. Este nuevo motor ha sido desarrollado a partir de aquel que montaron las versiones más potentes del Audi A3 y TT. Gracias a la ampliación del diámetro de cilindros, su cilindrada ha aumentado de 3.189 cc a 3.597 cc. Sus 360 Nm de par está disponible entre las 2.500 y las 5.000 rpm. Con 280 CV/206kW de potencia a 6.200 rpm.
Con un ángulo entre cilindros de 10,6 grados, el V6 es extraordinariamente compacto. Su bloque motor está compuesto de fundición gris y el accionamiento de las válvulas se realiza sin fricción por medio de balancines flotantes de rodillo con compensación hidráulica. Los árboles de levas de admisión y de escape, accionados mediante cadenas, se regulan continuamente con el objetivo de reducir las emisiones y para mejorar aún más la efectividad. También el colector de admisión permite mejorar el llenado de los cilindros. Al igual que el V8, el V6 también incorpora la inyección directa FSI .
El Audi Q7 3.6 FSI acelera en 8,3 segundos de 0 a 100 km/h; su velocidad máxima es de 220 km/h. (Valor provisional).
El 3.0 TDI de 233 CV
Este motor proporciona con sus 2.967 cc de cilindrada, una potencia y par motor: 233 CV/171 kW y 500 Nm. Esta oferta máxima de par motor ya está disponible a partir de las 1.750 rpm.
El V6 de cuatro válvulas con turbocompresor pertenece, al igual que el V8, a la nueva familia de motores en V de Audi. Mide sólo 440 mm de longitud. El bloque motor está fabricado en fundición de grafito vermicular, que en comparación con la fundición gris reduce su peso un 15%. A pesar de la más elevada rigidez, el motor pesa sólo 226 kg.
Al igual que el V8 FSI, el V6 TDI también incorpora un accionamiento por cadena para los grupos secundarios y para los árboles de levas. En su culata actúan balancines flotantes de rodillos antifricción con compensación hidráulica. Las bujías de incandescencia rápida han sido equipadas para soportar el frío más intenso; se calientan en un plazo de dos segundos a 1.000 grados centígrados de temperatura.
Common rail con 1.600 bar de presión
La preparación de la mezcla está a cargo de un sistema de conducto común o common rail de última generación. Este nuevo sistema dispone, por un lado, de una bomba de alta presión y, por el otro, de un conducto de distribución por cada fila de cilindros. El elevado valor de la presión de inyección de hasta 1.600 bar proporciona una dispersión más homogénea del combustible y, por lo tanto, una preparación más efectiva de la mezcla que, por eso, puede quemarse termodinámicamente con más eficacia.
La novedad más importante que presenta el sistema common rail actual es sin duda alguna los inyectores piezoeléctricos en línea de Bosch. Estos inyectores utilizan el efecto denominado “piezo”, mediante el cual se aplica una pequeña tensión eléctrica a un elemento cerámico, el cual, en consecuencia, altera su estructura cristalina. Como resultado se obtiene una determinada dilatación, que en los inyectores del TDI se transmite directamente en línea a las agujas de las toberas de inyección sin necesidad de activar para ello ningún dispositivo mecánico. Con los inyectores piezoeléctricos se puede variar casi a voluntad y optimizar el número de veces que se inyecta combustible en cada ciclo de trabajo. Los especialistas encargados de desarrollar los motores TDI en Audi han implementado en el caso concreto del V6 3.0 hasta cinco inyecciones distintas. En los regímenes inferiores, además de la inyección principal, se observan dos inyecciones piloto, mientras que en los regímenes intermedios se produce una más. Y hasta aprox. 2.500 rpm en circunstancias de carga parcial se efectúa además una inyección posterior simple.
Esta estrategia reduce los gases de escape y proporciona un desarrollo de la combustión más suave, aspecto este último que mejora sobre todo la acústica del motor. Acelera de o a 100 Km/h en 9,1 segundos, su velocidad máxima es de 210 km/h, y de 216 km/h si se equipa con la adaptive air suspension.
El consumo medio es de 10,5 litros por cada 100 km. Esto supone una autonomía de cerca de 1.000 km, ya que el tanque tiene un volumen de 100 litros. El TDI incorpora a bordo un sistema de recirculación de gases de escape, cumple con la normativa Euro 4 y está equipado opcionalmente con un filtro de partículas Diesel libre de mantenimiento.
Cambio automático de seis etapas
Para transformar de forma óptima la elevada potencia de los motores en propulsión, el Audi Q7 4.2 FSI y el 3.0 TDI equipan de serie el cambio automático tiptronic. Según la motorización, existen dos variantes técnicas diferentes, que sin embargo presentan las mismas propiedades dinámicas.
Las seis etapas del tiptronic son más bien amplias, el convertidor de par con su amortiguación y su aumento de par es especialmente apto para salir en pendiente y sustituye a una caja reductora. Gracias a su elevado grado de rendimiento y a su capacidad de transmisión de hasta 750 Nm. El cambio en la versión para el V6 3.6 FSI pesa sólo 80 kg.
De la gestión del cambio se hace cargo el programa de cambio dinámico DSP. Este programa se adapta al estilo individual de cada conductor y a las condiciones del trayecto, reaccionando de forma adaptiva a los cambios. El control mediante el DSP es muy variable y los cambios se realizan siempre de un modo preciso, espontáneo, rápido y delicado.
Programa deportivo
Un programa deportivo especial, el nivel S, posibilita un modo de conducción mucho más dinámico, ya que con el las marchas se cambian más tarde y de un modo más rápido. Al reducir de marcha para coger impulso, el Motronic realiza una aceleración intermedia. Se puede participar en el cambio de marcha de forma activa en cualquier momento, bien mediante el nivel de cambios especial en la palanca de cambio o bien con ayuda de las levas de cambio opcionales ubicadas en el volante. Para el uso del Audi Q7 fuera de carretera, el tiptronic ha sufrido una serie de modificaciones. Los árboles de transmisión, sus soportes y el bloqueo de aparcamiento han sido reforzados, mientras que se han realizado modificaciones en el cárter del aceite y en el filtro de aspiración para garantizar el suministro de lubricante incluso en condiciones extremas.
Tracción total
En el Audi Q7, cuyos motores se montan longitudinalmente, cuenta con un diferencial central autobloqueante en el árbol de transmisión se encarga de distribuir la fuerza motriz entre las cuatro ruedas de forma óptima. Este diferencial central consta de un mecanismo autobloqueante basado en el principio de un tornillo sin fin, que funciona de manera exclusivamente mecánica y por lo tanto inmediata.
Su efecto autobloqueante se produce sólo en circunstancias de empuje; tanto al frenar como al trazar las curvas, el engranaje admite ciertas diferencias de velocidad.
Como ya sucediera en el RS 4 y en el S8, también el Audi Q7 incorpora un diferencial central autobloqueante de última generación. Este dispositivo distribuye las fuerzas entre el eje delantero y trasero de manera asimétrica-dinámica en una relación de 40:60. En condiciones extremas sobre terreno o al cambiar las circunstancias de la calzada, el diferencial es capaz de dirigir hasta un 65% de la fuerza hacia delante o hasta un 85% hacia atrás. En caso de que la rueda de un eje patine, el bloqueo electrónico del diferencial EDS la estabiliza mediante intervenciones en los frenos.
La caja de transferencia del Audi Q7 se ha montado junto a la caja de cambios automática. Un árbol hueco en el engranaje es el encargado de transmitir las fuerzas al diferencial central autobloqueante. Es ahí donde se distribuyen; una parte algo mayor se envía al árbol cardán a través de la corona y del árbol secundario coaxial, y de allí a la parte trasera. La parte más pequeña pasa al planetario. Desde allí se envía mediante una cadena a un segundo árbol cardán, que va al eje delantero pasando por la caja de cambios.
El tren de rodaje Audi Q7 está inspirado en suspensiones de brazos transversales dobles. A su vez, los amplios recorridos de los muelles, una altura de la carrocería con respecto al suelo de 205 mm, así como la robustez de las piezas de construcción tienen muy en cuenta las necesidades en el ámbito offroad. El tren de rodaje de acero de serie, el equipamiento opcional ofrece la posibilidad de montar la suspensión neumática “adaptive air suspensión”.
La distribución entre ejes con una carga algo superior en el eje trasero tiene una relación de 40:60 por ciento entre el eje delantero y trasero.
Audi incluye en el equipamiento de serie del Audi Q7 una suspensión de muelles de acero convencional y amortiguación de dos tubos hidráulica. La distancia con respecto al suelo es de aprox. 205 mm para garantizar su aptitud sobre el terreno. Los recorridos de los muelles se han ajustado de un modo correspondientemente largo y confortable. Tiene una batalla de 3.002 mm.
Brazos oscilantes transversales de aluminio
Con intención de aumentar el confort de suspensiones y la dinámica de conducción, los brazos transversales dobles del eje delantero del Audi Q7 se han fabricado en aluminio. En el caso del brazo oscilante transversal triangular ubicado en la parte superior, se trata de una pieza de fundición, mientras que el inferior es forjado. También el soporte para el amortiguador y para el brazo superior ha sido fabricado en aluminio.
El nivel inferior de los brazos y la barra estabilizadora, que están formados por una estructura tubular de acero de alta resistencia, se han fijado a un bastidor auxiliar de acero muy resistente, en el que también se ha montado la dirección. Los soportes incorporan una amortiguación hidráulica que minimiza la rumorosidad de rodadura y mejora aún más el confort.
Servotronic con asistencia variable
Todas las versiones Audi Q7 vienen equipadas de serie con dirección asistida servotronic dependiente de la velocidad. El servotronic está adaptado a un modo de conducción generalmente “deportivo”, variando su transmisión según el ángulo del volante entre aprox. 10,1:1 y 16,5:1. Al girar levemente el volante partiendo de la posición central, la dirección reacciona de un modo algo más indirecto; esto contrarresta las reacciones nerviosas del Q7 a altas velocidades y estabiliza mediante ligeras correcciones la conducción en línea recta. Si el ángulo de giro del volante es mayor, el sistema de control es más directo en el sentido de una sensación de marcha activa.
En el eje trasero, el brazo oscilante transversal superior y soporte transversal superior han fabricado en aluminio forjado. La barra de acoplamiento está compuesta por rolled tailored blanks de peso optimizado, o lo que es lo mismo, por componentes de chapa laminada de espesor diferenciado, que gracias a los distintos grosores de las chapas de acero conjugan un peso reducido con una elevada resistencia en aquellas partes que soportan una carga especial.
Todos los brazos están acoplados al bastidor auxiliar, que también soporta el diferencial del eje trasero. Las suspensiones se alojan en un larguero propio fabricado en fundición de aluminio y fijado a la carrocería. Su posición de montaje, claramente inclinado hacia el interior, reduce la altura de construcción proporcionando así más espacio en el interior para alojar la tercera fila de asientos.
Los cojinetes de goma y metal del eje trasero han sido optimizados teniendo en cuenta la utilidad especifica de cada uno de ellos. Allí donde aparecen cargas en dirección longitudinal, su resistencia a la torsión es reducida con la intención de elevar el confort de las suspensiones. Sin embargo, las cargas transversales se absorben para mejorar la estabilidad en marcha.
Llantas y neumáticos
El Audi Q7 rueda de serie con llantas de aleación ligera de 18 pulgadas equipadas con neumáticos en formato 235/60; en el ocho cilindros, las dimensiones de los neumáticos son 255/55. Las llantas que montan miden 7,5 pulgadas de ancho en las versiones con motores V6 u 8 pulgadas para las motorizaciones V8. Cada una de ellas es capaz de soportar una carga de rueda de 900 kg y pesa sólo 11,3 ó 12,0 kg respectivamente.
Opcionalmente pueden equiparse otras ruedas de dimensiones de 18, 19 ó 20 pulgadas. La novedad óptica es sin duda la nueva llanta de aleación ligera de 20 pulgadas en diseño de 5 radios dobles. Los laterales de los radios se han pintado en color antracita y presentan superficies de diseño pulido. Si se decide equipar al Audi Q7 cinco plazas con ruedas de 18 pulgadas, éste dispondrá además de una rueda de repuesto del mismo tipo. La versión de serie del Audi Q7 está equipada con neumáticos de verano, apropiados tanto para la conducción por carretera como por terreno. El equipamiento opcional ofrece ruedas especiales para conducción offroad en formato de 18 pulgadas.
El Audi Q7 incorpora como equipamiento opcional la última generación de la suspensión neumática adaptive air suspension. La combinación de la suspensión neumática y del sistema de amortiguación electrónicamente controlado pretende dar como resultado una buena relación entre eficacia y confort.
La suspensión neumática se compone básicamente de un compresor, dos depósitos con un volumen de unos 10 litros y cuatro amortiguadores de regulación electrónica que se han integrado en los tubos telescópicos. Los fuelles exteriores son de un material especialmente fino con la intención de obtener una reacción sensible de la suspensión.
Mediante el elemento de mando del módulo Multi Media Interface MMI pueden seleccionarse tres programas de conducción diferentes, que ofrecen desde una deportividad muy destacable hasta el mayor confort: Dynamic, Automatic y Comfort. La unidad de gestión del sistema varía la característica de los muelles y amortiguadores dependiendo del modo seleccionado y de la velocidad del vehículo. Los modos de conducción y las distintas alturas de la carrocería pueden consultarse a través del monitor del MMI, mientras que la regulación del nivel se muestra además en la pantalla central del sistema de información al conductor.
Más deportividad en el modo Dynamic
El modo Automatic ha sido ajustado de manera que ofrezca las mejores propiedades de conducción en cualquier situación. Aquellos conductores que deseen un mayor confort pueden optar además por el modo Comfort y disfrutar de una amortiguación más suave. En ambos casos, hasta una velocidad de 120 km/h la carrocería se encuentra al nivel normal, es decir, a 180 mm de distancia con respecto al suelo. Por el contrario, en el modo Dynamic, la carrocería se encuentra desde un principio 15 mm más baja.
Independientemente del modo seleccionado, la carrocería desciende su nivel automáticamente en autopista hasta encontrarse a 165 mm de distancia con respecto al suelo siempre que se circule durante al menos 30 segundos a una velocidad superior a los 120 km/h. A partir de 160 km/m durante más de 20 segundos, la carrocería vuelve a bajar otros 15 mm con la intención de optimizar la estabilidad y el coeficiente de penetración. Si se reduce la velocidad, la suspensión neumática vuelve a elevar la carrocería en dos niveles hasta alcanzar el nivel normal. Estos cambios se producen a los 130 y a los 70 km/h.
El sistema de estabilización dinámica del balanceo recibe información de cuatro sensores ubicados en las suspensiones de las ruedas y otros tres sensores en la carrocería, reacciona de forma activa a los comandos de giro y a los movimientos de rodadura de la carrocería. Ante un balanceo de la carrocería, el sistema actúa aumentando la fuerza de amortiguación puntualmente. Al trazar curvas a gran velocidad, por ejemplo, la carrocería se mantiene estable en la horizontal.
Sobre terreno, se podrá optar por otros dos modos de conducción. El modo offroad eleva la carrocería 25 milímetros por encima del nivel normal y puede utilizarse hasta una velocidad de 100 km/h. En el modo Lift la carrocería vuelve a aumentar su altura 35 mm (240 mm de altura total), ofreciendo así la posibilidad de superar mayores obstáculos a bajas velocidades.
Dos funciones adicionales completan las posibilidades de la suspensión: mediante una tecla en el maletero el conductor puede rebajar la altura del borde de carga 71 milímetros, de modo que se facilita la carga de objetos pesados en el vehículo. Para la conducción con remolque existe un modo de suspensión especial. La suspensión neumática funciona también como una regulación del nivel de alta tecnología: independientemente de la carga, el nivel de la carrocería se mantiene siempre a una altura ideal.
Nuevo ESP con aptitudes todo terreno
El ESP integra una gama de funciones: el sistema antibloqueo ABS con distribución electrónica de la fuerza de frenado y asistente de frenado hidráulico, el control electrónico de tracción ASR y el bloqueo electrónico del diferencial EDS.
El ESP incorpora nuevas propiedades, entre las que destaca un modo offroad que se activa por medio de un botón. En este caso, tanto al frenar como al acelerar, el sistema admite un cierto patinaje de las ruedas que resulta de gran ayuda sobre suelo con gravilla. A bajas velocidades existe un amplio margen de juego que permite dar prioridad a la estabilidad del vehículo conforme este va ganando en velocidad.
En el descenso de pendientes cobra protagonismo una función especial de asistencia. Por debajo de los 20 km/h, este sistema mantiene la velocidad constante en bajadas muy inclinadas. En situaciones en las que se corre el peligro de volcar, el sistema de estabilización antivuelco realiza las frenadas necesarias para estabilizar aL Q7.
Vados de más de 53 cm de profundidad
Su máxima capacidad ascensional posible es de 31 grados. El ángulo ventral mide 21 grados en aquellos vehículos con suspensión de muelles de acero, mientras que en las versiones Audi Q7 con suspensión neumática es de 24 grados. La diferencia en el ángulo de salida es similar (23/25 grados). Al atravesar corrientes o cúmulos de agua, puede sumergirse 500 milímetros (con suspensión neumática 535 mm).
Los amantes de un estilo de conducción basado principalmente en las propiedades todoterreno dispondrán pronto de un paquete offroad. Su equipamiento incluye, entre otros elementos, molduras protectoras frontales pintadas, placas protectoras de los bajos del motor de acero inoxidable cepillado en el frontal y en la trasera del vehículo, pasos de rueda más anchos y estribos.
Más seguridad con remolque
En combinación con el enganche opcional para remolques, el ESP ofrece otra función adicional. La función de estabilización de tensión para remolques es un indispensable elemento de seguridad para la conducción con remolques. Este sistema detecta posibles vibraciones y balanceos del remolque y lo estabiliza mediante la intervención automática en los frenos. Según sea la situación de peligro, el ESP frena bien las ruedas delanteras o las cuatro ruedas. En ese momento, el sistema avisa a los vehículos que nos siguen activando las luces de freno.
Los cuatro discos son autoventilados. En el eje delantero miden 350 mm de diámetro y 34 mm de grosor, mientras que en el eje trasero las dimensiones son de 358 mm en la versión 4.2 FSI y 330 mm en el TDI. Las pinzas de freno delanteras, de seis pistones, son de fundición de aluminio anodizado negro. Para una mejor refrigeración de los frenos se han incorporado canales de refrigeración en los bajos del Q7.
Los discos pulidos son insensibles a la suciedad, característica de gran importancia para la conducción offroad. Cantos protectores se encargan de evitar que los canales de frenado sufran los daños que pueden causar los golpes de las piedras.
Otro elemento opcional de seguridad es el sistema de control de presión de los neumáticos, que vigila constantemente la temperatura y la presión de las cuatro ruedas. En caso de producirse una pérdida de presión, el sistema envía un mensaje de aviso, de diferente prioridad dependiendo de la gravedad de la pérdida, a la pantalla del MMI. El conductor puede consultar en todo momento la presión de llenado de los neumáticos en el monitor. Este sistema es muy eficaz para prevenir accidentes; en el 85% de los casos en los que se pincha una rueda se ha producido antes una pérdida de presión que ha pasado desapercibida.
El equipamiento opcional incluye una serie de sistemas de asistencia a bordo que proporcionan confort y seguridad.
Adaptive cruise control
El Audi Q7 estrenará un nuevo control automático de velocidad controlado por radar con control de la distancia, denominado adaptive cruise control. Este nuevo sistema regula la distancia y la velocidad del vehículo de 0 a 200 km/h. Así, el sistema es capaz de frenar el vehículo hasta la parada completa. El Audi Q7 es el primer Audi y el primer SUV en todo el mundo en incluir esta tecnología, que consigue eliminar gran parte de las incomodidades que supone un atasco.
Sobre todo cuando el tráfico avanza lentamente, en caravanas y en tráfico fluido en ciudad, este nuevo sistema ofrece grandes ventajas de confort, tal y como han demostrado extensas pruebas en núcleos urbanos y en carreteras principales muy transitadas. En muchas ocasiones el conductor ni siquiera tendrá que detener el vehículo, pudiendo continuar la marcha a velocidad de fluencia. En caso de tener que detener el vehículo, para volver a ponerse en movimiento basta con soltar el pedal del freno e inclinar levemente la palanca del regulador de velocidad ubicado en la columna de dirección.
Cuatro programas de conducción
Por medio de la palanca situada a la izquierda de la columna de dirección el conductor del Audi Q7 podrá determinar la velocidad deseada.
Además, a través del sistema MMI podrá seleccionar uno de los cuatro programas de conducción, que incluyen la distancia temporal con respecto al vehículo precedente (entre 1,0 y 2,3 segundos) y la dinámica de la regulación (de deportiva a confortable). Los ámbitos de distancia se muestran en la pantalla del sistema de información al conductor.
El sensor del sistema ha sido integrado discretamente en la zona de la matrícula. En comparación con la primera generación, el nuevo sistema incorpora una nueva función. Durante la marcha se envían ondas en la frecuencia 76,5 giga hertzios; estas ondas abarcan un campo de 180 metros de longitud (hasta ahora eran 150 m) y un ángulo de apertura de ocho grados (hasta el momento cuatro grados). Teniendo en cuenta la diferencia entre mediciones consecutivas, el sistema calcula si la distancia con respecto al vehículo que circula delante cambia y en qué medida; también recoge el ángulo del citado vehículo con respecto al sentido de marcha.
El sistema de radares está incluido en la red CAN, que abarca todo el vehículo, poniéndose en contacto de este modo en cuestión de milésimas de segundo con las unidades de control del motor, el cambio y los frenos. Mediante intervenciones en el freno y en el acelerador, el sistema adapta la velocidad del Audi Q7, garantizando en todo momento la comodidad del conductor. Así mismo, la deceleración iniciada por el sistema se ha limitado intencionadamente a 4 m/s2, ya que, ante todo, el adaptive cruise control es un sistema de confort.
Avisos en dos niveles
En situaciones peligrosas, como puede ser el caso por ejemplo si el coche precedente frena repentinamente, se activa otra novedosa función: un aviso de colisión denominado braking guard. Si el conductor del Audi Q7 no reacciona personalmente dentro de un periodo de tiempo preestablecido, el aviso se produce en dos niveles. En primer lugar suena un gong, a la vez que se ilumina una señal roja parpadeante en el cuadro de instrumentos.
En caso de que el conductor no reaccione, el sistema, en el segundo nivel, provoca un tirón de aviso claramente perceptible mediante un rápido establecimiento de la presión en el sistema de frenos. De momento sigue sin ejecutar una deceleración permanente, pero ya ha avisado de forma efectiva al conductor para que realice una frenada de emergencia. Mientras tanto, el sistema de frenos se abastece de presión para, en caso de que el conductor pise el pedal del freno, poder efectuar una frenada de emergencia sin ningún tipo de demora. Los ingenieros de Audi reconocen que se trata de una solución altamente efectiva, después de haber realizado varias pruebas en las que se analizaron distintos tipos de avisos. Esta nueva tecnología cobra vital importancia teniendo en cuenta que, según un estudio de la Confederación de la Industria Aseguradora alemana, las reacciones tardías son causa del 25% de todos los accidentes en carretera.
Audi Side Assist
En todos los sistemas de asistencia al conductor altamente desarrollados, como por ejemplo el ESP, el principal objetivo de los investigadores de Audi es el de conseguir que las situaciones peligrosas ni si quiera lleguen a producirse. Por ello existe un departamento interno que se dedica a estudiar los accidentes, denominado “Audi Accident Research Unit”. Su objetivo es analizar aquellos campos en los que las personas suelen cometer errores y anularlos por medio de soluciones de alta tecnología en el vehículo. El nuevo Audi side assist es una de esas soluciones.
Al igual que sucede con el adaptive cruise control de última generación, el Audi side assist también recurre a la tecnología inteligente por radar. El side assist, una novedad mundial, se ha concebido especialmente para facilitar el cambio de carril vigilando el crítico ángulo muerto. Dos sensores de radar de 24 giga hertzios ubicados en el parachoques trasero vigilan el espacio al lado y detrás del Audi Q7, avisando al conductor, como apoyo adicional a la imagen del retrovisor, cuándo un vehículo se aproxima. El alcance de los sensores es de hasta 50 metros.
Iluminación LED
Cuando otro vehículo circula más o menos a la misma velocidad que el nuestro en una zona crítica o si se acerca a gran velocidad desde atrás, se enciende un LED amarillo en la carcasa del retrovisor de forma permanente. De este modo, el conductor recibe el aviso con sólo echar un vistazo al retrovisor. No lo percibirá mientras mantenga la vista hacia el frente, ya que este aviso no debe molestar al conductor. Si a pesar de la luz de aviso el conductor decide activar el intermitente indicando que va a cambiar de carril (activando brevemente la palanca del intermitente, éste se activa tres veces), los LEDs se iluminan con más potencia y empiezan también a parpadear.
Por motivos de homologación, el indicador se ha integrado en la parte interior de la carcasa del retrovisor, de modo que, prácticamente, sólo el conductor puede verla. La luminosidad del sistema se adapta a las condiciones de la luz ambiental, aunque también puede regularse por medio del MMI. Se activa a partir de una velocidad del 60 km/h y también puede desconectarse. Audi side assist no interviene en el control del vehículo.
Audi Parking System Advanced
Para el Audi Q7, Audi ofrece tres sistemas de ayuda de aparcamiento diferentes. Dos de ellos ya se conocen por su implementación en otros modelos de la casa: el parking system trasero con indicaciones acústicas (que pertenece al equipamiento de serie del Audi Q7 en muchos mercados) y el parking system plus delantero y trasero con indicaciones acústicas y ópticas.
La nueva versión se denomina Audi parking system advanced e incorpora una cámara para la marcha atrás. Esta cámara, extremadamente sensible a la luz, está integrada completamente en el tirador del portón del maletero y abarca con sus 130 grados de ángulo una amplia zona detrás del vehículo. Sus imágenes se envían en una calidad excelente al monitor del MMI. Soporta una aceleración de hasta 100 g; un 150% más de lo que suele alcanzarse al cerrar el portón del maletero.
Al dar marcha atrás, el sistema indica al conductor la maniobra que tiene que realizar por medio de distintos campos y líneas de ayuda. Al aparcar, las superficies de color azul indican el espacio que necesita el Audi Q7, de modo que queda claro si el espacio entre dos vehículos es suficientemente grande. Las líneas azules proporcionan ayuda a la hora de girar. Al aparcar en batería, las líneas de color naranja indican el curso. La imagen de la cámara muestra también el parachoques trasero y una bola de remolque desplegada, de modo que resulta más fácil enganchar el Q7 a un carro o a una caravana.
El equipamiento de serie se compone del cambio automático de seis etapas, llantas de aleación ligera de 18 pulgadas, el programa electrónico de estabilización ESP, faros halógenos con cristales transparentes, faros antiniebla, barras del techo en aluminio anodizado, retrovisores exteriores térmicos regulables y abatibles eléctricamente con intermitentes en tecnología LED, sistema de escape de doble salida, sensor de luz y lluvia, un climatizador automático, sistema de mando MMI basic plus con pantalla monocromática que incluye también un lector de CDs integrado en el tablero de instrumentos, ocho airbag y alarma antirrobo.
En la segunda fila de asientos, los ocupantes pueden ajustar su respaldo de forma individual o utilizar la parte central como reposabrazos o apertura de carga. Las plazas exteriores vienen equipadas con el sistema de fijación para asientos infantiles Isofix. El confort a bordo y el valor funcional del Audi Q7 se ven además ampliados por cuatro soportes para botellas, seis portavasos y cuatro tomas de corriente de 12 voltios. Una cortinilla cubre el maletero, bajo el que encontramos un suelo de carga doble. Los modelos que no equipen una rueda de repuesto de iguales características que las demás incluyen en el compartimento inferior una bandeja protectora.
Equipamiento opcional
Los equipamientos opcionales se componen de una completa gama de llantas de aleación ligera en formato de 19 ó 20 pulgadas, neumáticos especiales todo terreno, una pintura exterior metalizada, acristalamiento oscurecido y, en breve, un paquete offroad. Los conductores de remolques disponen de dos dispositivos de remolque diferentes, uno mecánico y otro eléctrico.
Faros xenón plus (de serie en la versión 4.2 FSI), sistema de iluminación dinámica en curva adaptive light, ayuda de aparcamiento Audi parking system advanced, que incorpora una cámara para la marcha atrás, el asistente para el cambio de carril Audi side assist y, más adelante, el adaptive cruise control regulado mediante radar, sistema de apertura y arranque sin llave advanced key. Para los asientos, Audi ofrece tres configuraciones: en versión de 5 plazas, de 7 plazas con dos asientos adicionales en la tercera fila y de 6 plazas con dos asientos de gran en la segunda fila.
Para los asientos del conductor y del acompañante (así como para el volante), se dispone de un ajuste eléctrico, sin olvidar la posibilidad de equipar asientos deportivos. Los asientos delanteros y las plazas exteriores de la segunda fila pueden incorporar calefacción. El ajuste longitudinal opcional para los asientos de la segunda fila proporciona mayor espacio para los pies.
La zona de carga incorpora opcionalmente un sistema de rieles, una gran bolsa para esquís extraíble, una alfombrilla reversible y una caja portaobjetos desplazable. El equipamiento opcional incluye además un accionamiento eléctrico para abrir y cerrar el portón del maletero. Adicionalmente, el conductor del Audi Q7 puede programar personalmente el ángulo de apertura ideal del portón. En el interior, el paquete portaobjetos y un reposabrazos permite una mayor capacidad.
El techo corredizo de tres piezas open sky system, un climatizador automático de confort con regulación para cuatro zonas y una calefacción estacionaria que incluye una función de ventilación, proporcionan un mejor confort climático en el interior. Las lunas traseras pueden equiparse con cortinillas manuales. Las inserciones especiales y los cuatro paquetes de diseño disponibles darán un toque más personal.
En resumen:
Carrocería:
- Dimensiones: longitud 5,09 m, ancho 1,98 m, alto 1,74 m, batalla 3,00 m
- Disponible en versión de cinco, seis o siete plazas
- Volumen del maletero hasta 2.035 litros, doble suelo de carga
Motores:
- 4.2 V8 FSI con 350 CV (257 kW) de potencia, 440 Nm a 3.500 rpm
- 3.6 V6 FSI con 280 CV (206 kW) de potencia, 360 Nm de 2.500 a
5.000 rpm (a partir del segundo semestre de 2006)
- 3.0 V6 TDI con 233 CV (171 kW) de potencia, 500 Nm a 1.750 rpm
Transmisión:
- Cambio tiptronic de 6 etapas, tracción permanente a las cuatro ruedas quattro con distribución asimétrica-dinámica del par motor
Tren de rodaje:
- Suspensiones de brazos transversales dobles parcialmente en aluminio y llantas de aleación ligera de 18 a 20 pulgadas
- Suspensión neumática opcional adaptive air suspension con nivel de altura regulable y estabilización dinámica del balanceo
- Dirección servotronic dependiente de la velocidad
Equipamiento:
- De serie: Multi Media Interface MMI basic plus
- De serie: Climatizador automático de confort
- Opcional: Xenón plus (de serie en el 4.2 FSI) y adaptive light
- Opcional: Techo de cristal panorámico open sky system
- Opcional: Sistema de apertura y arranque sin llave advanced key
- Opcional: Sistema de aviso para el cambio de carril Audi side assist
- Opcional: Control de la distancia a través de radar adaptive cruise control