El Mazda2 5p 1.6 CRTD de 90 CV es la versión más potente de la gama con motores Diésel. Está disponible con dos niveles de acabado (Active+ y Sportive). Ambas versiones cuestan 15.410 € y 16.860 € respectivamente.
Esta versión me gusta especialmente por las buenas cualidades que tiene como vehículo urbano, ya que es un modelo con una maniobrabilidad excelente y con un motor Diesel que le permite obtener un gasto de carburante más bien bajo (unos 5 litros en ciclo combinado).
Las dimensiones de la carrocería (3.895 mm de largo, 1.695 mm de ancho y 1.475 mm de alto) me parecen adecuadas para circular por ciudad con fluidez y para estacionar con suficiente facilidad.
Interior
Pese a que el nuevo Mazda2 tiene una longitud más reducida respecto a su predecesor, las dimensiones en altura y anchura son ligeramente mayores. De hecho, su habitáculo es de los más amplios de la categoría: 1.004 mm de espacio para la cabeza (máximo) en las plazas delanteras y 959 mm en las traseras, y espacio para los hombros de 1.340 mm delante y 1.300 mm detrás. Además, dos ocupantes adultos pueden viajar con suficiente comodidad en las plazas traseras, gracias a los 883 mm de espacio para las piernas (ver imagen).
En el puesto de conducción se encontrarán cómodos los conductores que valoren una posición sobreelevada, que permite dominar con más facilidad las dimensiones de la carrocería. La superficie acristalada es suficientemente amplia como para tener un buen nivel de visibilidad en todas las direcciones.
Aunque el volante únicamente es regulable en altura, creo que no es un gran inconveniente para que un buen número de conductores se adapten perfectamente a los mandos. Me gustó especialmente la posición de la palanca de cambios (está integrada en la consola central).
Los asientos que equipa nuestra unidad de pruebas son cómodos. La baqueta me parece algo corta y plana para ofrecer una sujeción adecuada, aunque perfecta para acceder al interior con facilidad.
Todos los plásticos del interior son duros al tacto. El ajuste de todas las piezas está cuidado, aunque la calidad de los materiales sea muy sencilla. El diseño del interior ofrece un aspecto moderno y desenfadado. Todos los mandos se manejan con facilidad, gracias a su ubicación y diseño. Desde el volante se puede manejar el equipo de sonido (ver imagen).
La instrumentación me ha parecido bastante clara (el velocímetro y el cuentarrevoluciones se controla visualmente con facilidad). El display del ordenador de a bordo está muy bien integrado dentro de la instrumentación, algo que es de agradecer.
El habitáculo me ha parecido bastante práctico en líneas generales. Hay espacios de almacenamiento útiles. Por ejemplo, una guantera con cerradura equipada con una bandeja para revistas que permite al usuario consultar cómodamente un mapa de carreteras (ver imagen). La consola del suelo, entre los asientos, tiene dos posavasos y detrás de ellos una bandeja para colocar artículos grandes, como un bolso (ver imagen). Los bolsillos laterales delanteros tienen capacidad para una botella de 0,5 litros y un mapa en formato A4 (ver imagen).
El maletero tiene una capacidad de 250 litros, ampliable hasta los 787 litros si se abaten los asientos en proporción (60/40) ver imagen. El espacio disponible es regular y muy bien aprovechado. Además, no es demasiado profundo, lo que facilita la carga de objetos pesados o voluminosos. Para las dimensiones y formas que tiene la carrocería y el espacio disponible en las plazas traseras la capacidad del mismo es adecuada.
Bastidor
El Mazda2 comparte plataforma con el nuevo Ford Fiesta. El diseño de las suspensiones es sencillo (el tren delantero tiene un diseño de tipo McPherson y el trasero es de barra de torsión).
En ciudad me ha parecido un coche maniobrable y fácil de conducir. Da sensación de coche pequeño y ágil (creo que estas son dos buenas cualidades para circular por ciudad con comodidad y agrado). La dirección tiene una respuesta eficaz y su asistencia es apropiada para manejarla con poco esfuerzo sin que pierda precisión en ningún caso.
No me ha parecido un coche agradable de conducir por dos razones: En primer lugar el guiado del cambio me ha parecido excesivamente duro como para manejarlo con comodidad y agrado. En segundo lugar, me hubiera gustado un mejor tacto y precisión en el grupo pedalier (acelerador, freno y embrague). Por último, la falta de bajos del motor tampoco aportaba lo necesario como para ofrecer una conducción lo suficientemente agradable.
Dinámicamente no es un coche que destaque especialmente frente a otros modelos. Su estabilidad es correcta sin más; ni emociona, ni es especialmente criticable. Eso sí, recomendamos el control de estabilidad (nuestra unidad lo equipa de serie), ya que el tren trasero se puede descolocar con facilidad cuando generamos un cambio de masas en curva. Las suspensiones tienen una reacción suave frente a las irregularidades.
Motor
El 1.6 CRTD es el motor Diesel más potente de la gama. Tiene una potencia de 90 a 4.000 rpm y un par máximo de 205 Nm a 2.000 rpm. Su rendimiento está por debajo de lo esperado, no obstante, es un motor que cumple para circular por ciudad y para cortos desplazamientos. La falta de respuesta a bajas revoluciones es, quizá, lo más criticable de esta mecánica.
Su consumo es bajo en todo tipo de condiciones. Según nuestras mediciones, el Mazda2 consumo 5,5 litros de media en ciclo combinado (ciudad/carretera). El nivel de emisiones (112 gr/km de CO2) le permiten quedar exento del impuesto de matriculación. Aquí puedes ver las especificaciones técnicas de esta versión.
El Mazda2 5p 1.6 CRTD de 90 CV es un coche ruidoso, sobre todo en frío. En carretera con el motor en su temperatura adecuada y a un ritmo constante los ruidos mecánicos se hacen notar en menor medida. Las resonancias generadas por la rodadura están bien aisladas, si tenemos en cuenta la categoría y el precio de este modelo.
El motor se encuentra asociado a una caja de cambios manual de cinco velocidades. Su desarrollo tiene el equilibrio adecuado para obtener buenas cifras de consumo y prestaciones. Lo peor del cambio es el tacto que presenta su guiado y lo mejor es la posición sobreelevada de la palanca de cambios (ver imagen).
Equipamiento
El Mazda2 no puede incluir elementos como el regulador y limitador de velocidad, volante con ajuste en profundidad, faros de xenón, conexión bluetooth o una toma USB para conectar dispositivos externos). En cualquier caso, la versión más equipada (Sportive) tiene elementos interesantes como el sensor de luz y lluvia, control de estabilidad, tarjeta "manos libres", kit exterior deportivo para la carrocería (alerón, spoiler delantero, faldones laterales y llantas de aleación de 16 pulgadas, retrovisores exteriores eléctricos (se pliegan automáticamente), airbag de conductor, pasajero y laterales.
Junto con el Renault Clio y Nissan Micra, el Mazda2 es de los pocos modelos de su segmento que pueden equipar una llave "inteligente". Esta llave permite que el acceso al habitáculo sea más cómodo. Si la llevamos encima podemos abrir las puertas mediante un botón situado en los tiradores exteriores de las puertas (también se puede abrir el maletero mediante otro botón). Una vez en el interior, no hace falta introducir la llave en el contacto, simplemente hay que girar un mando para poner el motor en marcha (ver imagen).
Texto: Gustavo Rodríguez
Fotos: G.R. y Mazda